"Pobreza y exclusión social
en la Unión Europea"
La pobreza y exclusión
social es una de las prioridades de las iniciativas comunitarias de la Unión
Europea. Por ello es necesario la colaboración de todos los Estados miembro en
el desarrollo de políticas sociales para poder paliar el agravamiento de esta situación
tanto a nivel europeo como regional. Esta propuesta está enmarcada en la
Estrategia Europa 2020 con el fin de conseguir la reducción de la miseria de 20
millones de personas en dicho año.
En cuanto a los temas
principales que se tratan en esta plataforma, se destacarán aquellos que
engloben cuestiones como el empleo, protección social e inclusión. Antes de
analizar los asuntos anteriormente mencionados, es importante recalcar el papel
de la coordinación y evaluación de cada área de intervención ya que es la clave
del éxito para alcanzar los objetivos establecidos, siendo fundamental que los
Estados participen a través de unos contenidos comunes y que además, estén
informados de los cambios y evolución de la problemática económica, política y
social de la UE-27, así como de promover la toma de decisiones de todos los
actores implicados en esta situación como son las ONG y las personas en riesgo
o situación de exclusión social. Al mismo tiempo se debe realizar una
evaluación 360º, es decir, una valoración mensual y anual para analizar los
progresos y fracasos de cada programa y que, de esta manera, se pueda actuar a
tiempo en caso que empeoro o favorezca su mantenimiento. Considero que estos
avances que se incorporan en relación a los dos conceptos antes citados, son
muy positivos pero, a la vez, difíciles de desarrollar por la estructura
política que alberga en algunos países de la Unión Europea como es el ejemplo
de España. Es un estado donde, por causa de la crisis y de la ideología de austeridad,
se está infravalorando el ámbito social, así como, a los profesionales que se
encargan de mejorar la integridad física, psíquica y social de estas personas. Y
que en realidad los servicios sociales, fundaciones, etc. son las que
verdaderamente pueden trabajar eficiente y eficazmente en el desarrollo de
soluciones. Por lo que sería conveniente dedicar parte del presupuesto a
subvenciones, ya que conocen de primera mano la realidad social y son los
únicos que realmente pueden generar un cambio de mentalidad tanto de la
sociedad como de los colectivos más vulnerables como pueden ser; gitanos,
mujeres o discapacidad, entre otros. En segundo lugar, la creación de la
innovación social con el establecimiento de buenas prácticas y experiencia
conseguirá una mayor involucración de las personas a las que se dirija dichas
actividades. Y por último, el apoyo a las empresas sociales sigue siendo un
reto para los países europeos, debiendo transmitir la mayor probabilidad de adquirir
un puesto de trabajo para aquellos ciudadanos que se encuentren en paro y en
situación de desventaja, sin despreciar el gran impacto medioambiental que
numerosas empresas multinacionales causan por realizar prácticas en condiciones
infrahumanas con el único objetivo de maximizar sus beneficios.
Una vez que se tiene conocimiento
del contexto en el que nos movemos, a continuación se procederá al análisis de
las materias donde se debe potenciar las políticas sociales.
EMPLEO
En este sector la problemática
más acusada, es el colectivo de jóvenes que están trabajando y que, aún así,
forman parte de esta situación. Asimismo, el colectivo de mujeres sigue
teniendo una alta tasa de desempleo. Por lo se deben fomentar la seguridad y
control en las condiciones de trabajo, así como, facilitar la incorporación al
mercado laboral a las mujeres, a través de guarderías o residencias donde poder
dejar a sus hijos o familiares dependientes mientras que éstas trabajan. Es una
iniciativa que se plantea pero que su éxito es casi nulo por los numerosos
recortes en prestaciones sociales. Finalmente, las minorías étnicas y otros
colectivos también necesitan un acceso al empleo a través de talleres gratuitos
de formación laboral, idioma o educación, entre otros.
PROTECCIÓN SOCIAL
En este sector se
destaca la problemática del sistema de pensiones y la escasa prevención y/o
intervención temprana ante situaciones de este tipo. En primer lugar, se
fomenta el “envejecimiento activo” para prolongar la edad de trabajar lo que me
parece una iniciativa arriesgada porque hay escaso trabajo para los jóvenes,
por lo que aumentar su edad aunque sea para equilibrar las futuras pensiones,
es impensable. Además, hay una franja de edad entre los 40-60 años que está en
grave riesgo de exclusión laboral siendo necesaria la promulgación de políticas
de formación y modernización para este núcleo. Por último y en segundo lugar, es
eficaz el desarrollo de campañas de información y concienciación a todos los
niveles sociales para aumentar la solidaridad de nuestros iguales.
INCLUSIÓN
En este sector es
primordial la integración de personas con enfermedad mental, colectivo marginado
socialmente en la actualidad, siendo causada principalmente por los escasos
recursos y programas destinados a la participación de estas personas en la
sociedad.
Como conclusión,
destacar el papel imprescindible de los emprendedores en el desarrollo de
proyectos FEDER y PROGRESS, así como, la
participación de los voluntarios en la mejora de la calidad y bienestar social
de aquellas personas privadas de las necesidades más básicas. También, su
participación social mejora la competitividad de profesionales y personas
cuidadoras facilitando su incorporación en el mercado laboral.
Y finalmente, la
plataforma europea contra la pobreza y exclusión social no va mal encaminada
sólo que debe tener presente una serie de consideraciones para asegurar la
consecución de sus objetivos.